sábado, 5 de diciembre de 2015

Practicar abdominales de forma segura

Llega la época navideña y nos surge el delirio de disminuir la ingesta previo a las fiestas para poder sobrellevar mejor los excesos de este momento del año.
Hay quien controla mejor la alimentación: evitando el exceso de bebidas con gas, alcohol y evitando alimentos ricos en grasas animales y hay quien decide quemar la grasa incrementando la actividad física, sobre todo quemando aquella que se va acumular más en la zona abdominal.
 
 
 
Quiero daros algunos consejos si habéis decidido realizar ejercicio abdominal para evitar que al hacerlos podáis provocaros lesiones:

La musculatura abdominal tiene la característica a diferencia de otros músculos en que no se apoya sobre hueso, tendón o ligamento, eso le infiere unas propiedades también diferentes al resto de musculatura.

Está formada por tres gruesas capas y la función primordial en nuestro cuerpo es la de proteger los órganos internos.

Además se complementa con dos músculos de gran potencia que son el psoas y el ilíaco (que ayudan en la flexión de la cadera, los cuáles tienen amplio rango de movimiento, no como los abdominales).

Como funciones de la musculatura abdominal destacan que:
-          Conserva la posición correcta del cuerpo

-          Mejora la respiración rítmica

-          Ayuda al movimiento global

-          Conserva la pelvis en su sitio, evitando curva exageradas en la columna vertebral

-          Da mayor eficacia en las acciones deportivas y de esfuerzo
El inconveniente que tiene, al ser diferente al resto de músculos de nuestro cuerpo, es que si no se ejercita y se entrena, se debilita y favorece que los órganos internos queden indefensos ante cualquier agresión externa.
 
El motivo de su entrenamiento debe ser precisamente el  orientado a mantener y mejorar las funciones que tiene la musculatura sobre el organismo. Es falso que para reducir el volumen graso abdominal debamos realizar abdominales, ya que tal y como hemos expuesto anteriormente, la musculatura abdominal cuando se ejercita aumenta de volumen, refuerza toda la cintura lumbopélvica  y favorece el mejor rendimiento en actividades de resistencia.
Entrenar esta musculatura tiene que ser de manera dirigida y controlada y no se debe realizar con una simple tabla de ejercicios abdominales, ya que una mala ejecución de los mismos pueden perjudicarnos a nivel interno o externo, por ejemplo, debemos tener especial cuidado en caso de: embarazadas, sobrepeso u obesidad, personas con dolencias lumbares, personas mayores de 65 años…
En los problemas de espalda como hernias discales o protusiones o dolencias en nervio ciático debemos estar supervisados por un profesional que explique la posición y el tipo de abdominal para evitar agravar el proceso inflamatorio de la enfermedad.
 
En las embarazadas una compresión excesiva en abdomen o en columna lumbar pueden empeorar la evolución del feto o empeorar la hiperlordosis (curvatura excesiva en región lumbar) que pueden ser origen de molestias en esta región o dolencia en n.ciático.
En las personas mayores de 65 años debemos evitar los movimientos forzados, para evitar así alteraciones de tipo vascular en la región cervical y cerebral, además de controlar los movimientos de las articulaciones que pueden estar afectadas por artrosis.
Queda claro pues que el trabajo de los abdominales tiene que estar orientado ya que puede provocar mayor daño que beneficio si no los realizamos adecuadamente.
Para finalizar, aprovechando que actualmente existe la posibilidad de realizarlo en muchos gimnasios y a través de consultas particulares de fisioterapeutas o entrenadores personales, están los HIPOPRESIVOS. ¿En qué consiste esta técnica? Para evitar problemas órganicos internos se han desarrollado unas técnicas novedosas que se conocen como abdominales hipopresivos, en los que se reduce la presión que ejercemos sobre la zona abdominal con el resto de ejercicios abdominales.
 
No olvidemos que son los músculos que mantienen la alineación corporal, por lo que si los mantenemos entrenados favoreceremos a aumentar la efectividad del ejercicio, el rendimiento del mismo  y disminuir el riesgo de lesión. No es ahora que hay que ejercitarlos, hay que mantenerlos con tono durante todo el año.